La Federación Española de Empresarios Profesionales de Automoción (CONEPA) ha iniciado una campaña a sus asociados para llamar su atención sobre los aspectos a tener en cuenta para garantizar un mantenimiento responsable de los neumáticos y evitar que sus clientes tengan problemas en las ITVs.
- Control del marcaje de homologación. La comercialización de neumáticos procedentes de mercados no europeos ha supuesto el rechazo en la ITV de un buen número de vehículos. Un neumático debidamente homologado lo distinguiremos cuando lleve marcado la letra “E” seguida de un número que nos indica el país de fabricación, seguido de un código numérico que comenzará por “00” si se trata de un neumático aprobado para vehículos comerciales o por “02” si el neumático ha sido aprobado para transporte de pasajeros. ¡Ojo! La estricta interpretación de las ITVs ha llevado a rechazar vehículos con neumáticos adquiridos a la vez de un mismo fabricante, mismas dimensiones y características, pero fabricados en distintos países.
- Dimensiones coincidentes o equivalentes a las que aparecen en la tarjeta ITV o en la homologación de tipo. El diámetro exterior del neumático podrá tener una tolerancia de +/- 3%.
- Índice de capacidad de carga y categoría de velocidad adecuados a las características del vehículo. El índice de carga y velocidad podrán ser superiores a los del neumático homologado en la ficha técnica, pero nunca inferiores.
- En el mismo eje, todos los neumáticos serán del mismo tipo. Desde el punto de vista de la seguridad, lo ideal sería que los neumáticos de un mismo eje sean exactamente iguales y con el mismo desgaste, ya que de lo contrario se pueden producir diferencias en la adherencia entre ambas ruedas que podrían ocasionar problemas de estabilidad del vehículo. Incluso en algunos modelos con programas de estabilidad más intrusivos puede llegar a producirse ocasionalmente la intervención del ESP por las diferencias de adherencia. Además la diferencia del desgaste del dibujo entre las ruedas de un mismo eje no deberán superar los 5 mm.
- Que la profundidad de las ranuras principales de la banda de rodadura cumpla las prescripciones reglamentarias. Recordad, en España la mínima profundidad del dibujo permitida es de 16 mm.
- Si los neumáticos han sido reesculturados, han de ir marcados con la palabra REGROOVABLE o el símbolo U.
- La inexistencia de desgaste irregular en la banda de rodadura. Los neumáticos deberán presentar un desgaste regular en todo el ancho del neumático y en el contorno diametral de la banda de rodadura. Desgastes irregulares suponen problemas de alineación o desajuste en el eje correspondiente.
- La inexistencia de ampollas, deformaciones anormales, roturas y otros signos que evidencian el despegue de alguna capa en los flancos o de la banda de rodadura.
- La inexistencia de cables al descubierto, grietas o síntomas de rotura de la carcasa, propiciados por un desgaste excesivo o deterioro provocado por el paso del tiempo en condiciones adversas.
- El montaje correcto de neumáticos unidireccionales. Muchos neumáticos están diseñados para girar en un único sentido con el fin de maximizar sus prestaciones, indicándose en el exterior de la carcasa con una flecha que señala el sentido de giro o con el texto “Outside” (lado exterior).
- Los neumáticos marcados con siglas FRT están montados exclusivamente en ejes portadores (no direccionales ni motrices). El acrónimo “FRT hace referencia a “Free Rolling Tire” (neumático de rodadura libre) y constituye una marca de uso obligado de acuerdo con la normativa CEPE. En consecuencia, aquellos neumáticos de remolque marcados con el acrónimo “FRT” deben utilizarse exclusivamente en ejes de remolque, sin que quepa la posibilidad de instalarlos en ninguna otra ubicación.
- La no interferencia del neumático con otras partes del vehículo. Se deberá comprobar tanto en el giro de las ruedas a ambos lados, como en las oscilaciones ascendentes y descendentes de la carrocería.
- Si existe, el funcionamiento del sistema de control de la presión de aire de neumáticos, mediante su propio sistema de autodiagnóstico. El incorrecto funcionamiento de este sistema será señalizado mediante un testigo luminosos o mensaje en el cuadro de instrumentos. Conviene tener en cuenta que en muchos modelos, tras corregir la diferencia de presión en alguno de los neumáticos, hay que resetear el sistema para eliminar el mensaje de aviso.
Recordad que el control de las ruedas en las inspecciones técnicas tiene un papel relevante, de ahí que todos los defectos relacionados con ellas sean considerados de graves.
Para más información, visita la web de la Federación Española de Empresarios Profesionales de Automoción.