Una secuencia de divertidas imágenes a tener presente todos los días.
Desde que el 11 de mayo de 2011 la FIA (Federación Internacional del Automóvil) lanzó su campaña Acción para la Seguridad Vial muchos son los apoyos recibidos por parte de líderes de la política en global, deportistas y empresas del sector del automóvil. Fruto de esta iniciativa, Michelin y la FIA elaboraron las “10 reglas básicas para una conducción segura” en una secuencia de divertidas imágenes que hoy os mostramos juntas aquí. ¡Aplícalas en el día a día!
Regla 1: Conductor o pasajero, abróchese el cinturón de seguridad.
El uso del cinturón de seguridad reduce a la mitad el riesgo de muerte en caso de siniestro. En 2013, 80 personas hubieran salvado la vida si hubieran llevado puesto el cinturón de seguridad.
Regla 2: Las reglas del código de circulación están hechas para protegernos, respétalas.
Desde el momento en que nos sacamos el carné de conducir y nos ponemos al volante, asumimos la responsabilidad de cumplir la normativa existente, evitando ser un peligro u obstáculo para los demás usuarios, adoptando un comportamiento adecuado en cada momento y asumiendo las consecuencias de nuestros actos.
Regla 3: Por su seguridad y la de los demás, respete las señales de limitación de velocidad.
A 120 km/h se necesita una distancia superior a un campo de fútbol para detener un vehículo, a partir de 80 km/h es imposible que un peatón salve la vida de un atropello y un aumento del 5% en la velocidad provoca un incremento del 10% en los siniestros que causan traumatismo y del 20%, en los siniestros con víctimas mortales.
Regla 4: Compruebe regularmente el desgaste y la presión de los neumáticos, sin olvidar la rueda de repuesto.
Las ruedas son el elemento de seguridad más importante del coche. Llevar unos neumáticos en perfecto estado supone tener una adherencia casi total con el pavimento y que no se produzcan vuelcos o salidas de la vía. La profundidad del neumático debe tener como mínimo 1,6 mm. Comprueba la presión al menos una vez al mes.
Regla 5: No conduzca si está bajo los efecto del alcohol o de drogas.
Todavía más de 100.000 conductores al año dan positivo en los controles preventivos de alcohol y drogas. Los resultados positivos en conductores fallecidos han aumentado en más de 7 puntos entre 2008 y 2012: el 47,3% tenían presencia en sangre de alcohol, drogas o psicofármacos. ¡Prácticamente 1 de cada 2 conductores muertos en 2012 o había bebido o se había drogado!
Regla 6: Cuando coja el coche, coloque a sus hijos en sillas homologadas.
Parece increíble pero en 2012, 15 de los 40 niños muertos en siniestros viales no utilizaba ningún dispositivo de seguridad. Conviene recordar a los padres que solo a 50 km/h el impacto recibido por un cuerpo en un choque frontal es similar al de caerse de un tercer piso. La DGT llega más lejos con sus datos: una sillita homologada pero mal colocada multiplica por cuatro el riesgo de muerte infantil en caso de siniestro.
Regla 7: No utilice el móvil mientras conduzca.
A pesar de la prohibición un 78% de los conductores españoles asegura llevar encendido el móvil mientras conduce; un 51,8% confiesa hablar mientras conduce y 1 de cada 10 reconoce haber tenido algún incidente por esta razón. Reducir nuestra atención al volante es poner en riesgo nuestra vida y la de los demás.
Regla 8: En caso de somnolencia o cansancio, pare para descansar.
Las personas que conducen con sueño lo hacen de manera similar a las que han consumido bebidas alcohólicas. Se estima que en el 16,5% de los siniestros viales mortales estaba involucrado un conductor cansado o con sueño.
Regla 9: En los vehículos de dos ruedas proteja su cabeza con un casco.
El casco es la única barrera que impide el contacto directo de la cabeza con algún objeto o superficie, absorbiendo el golpe y reduciendo la aceleración. Así que, en moto o en bicicleta, el casco se debe llevar siempre puesto –ajustado y abrochado– para proteger y amortiguar los golpes en caso de accidente.
Regla 10: En la carretera, sea cortés y atento con los demás.
Si consideramos que las normas de tráfico son acuerdos adoptados para el uso de las vías públicas, nuestros derechos están condicionados por los derechos de los demás a ocupar el mismo espacio. Motoristas, ciclistas y peatones muchas veces tienen que adoptar actitudes defensivas por la falta de responsabilidad y prudencia de los conductores.