La Asociación Española de la Carretera (AEC) vuelve a auditar el estado de la red viaria. El déficit de mantenimiento ha incrementado las emisiones un mínimo de 25 millones de toneladas de CO2 en una década. Revertir la situación supondría la inversión de 7.500 millones de euros.
La Asociación Española de la Carretera (AEC) ha presentado su último informe sobre “Necesidades de Inversión en Conservación”, realizado en el segundo semestre de 2019, tras auditar la red viaria, tanto la que es de competencia del Estado como la que gestiona las Comunidades Autónomas y las Diputaciones forales y provinciales. En términos generales, el estudio revela cómo la falta de conservación está haciendo mella en las infraestructuras viarias españolas, un patrimonio valorado en 215.000 millones de euros y que, a partir del año 2009, “ha sido abandonado a su suerte víctima de los sucesivos y reiterados ajustes en los presupuestos públicos”. En concreto, solo en la red dependiente del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, entre 2009 y 2019, los recursos destinados a conservación y seguridad vial se han reducido en un 76%.
De los 100.000 kilómetros de carreteras representados en la muestra auditada por la AEC, un total de 10.000 km presentan deterioros graves en más del 50% de la superficie del pavimento. Roderas, grietas en las rodadas, agrietamientos gruesos, desintegraciones, deformaciones y grietas erráticas son los daños más frecuentes, los cuales pueden afectar a la estructura de la plataforma, comprometiendo la comodidad, eficiencia y seguridad de la circulación e incrementando las emisiones de gases a la atmósfera. Si en 2001 la conservación de la red viaria aprobaba holgadamente el examen periódico de la AEC, en 2019, prácticamente veinte años después, roza el muy deficiente.
Darle la vuelta a esta situación requeriría una inversión mínima de 7.463 millones de euros, según la Asociación Española de la Carretera, 2.376 millones en la red estatal y 5.087 en la red autonómica y provincial. Esto supone un incremento del 5,7% respecto a la última auditoría realizada en 2017.
Pavimento, señales, marcas viales, barreras metálicas… Todo lo que toca renovar y/o sustituir
El estado del pavimento obtiene la peor nota en 20 años en la auditoría de la AEC, acumulando el 94% del déficit de conservación estimado, lo que se traduce en unas necesidades de inversión en reposición y refuerzo de firmes cifradas en 7.008 millones de euros. Por otro lado, sería necesario renovar 374.000 señales de código, el 72% de las mismas por tener el reflectante caducado, así como repintar las marcas viales de 38.500 kilómetros de carreteras, dado el mal estado de la señalización horizontal.
Las barreras metálicas –teniendo en cuenta que la AEC solo estudia la barrera instalada y no la necesidad de su instalación en aquellos tramos que carecen de la misma– se mantienen en el suspenso, aunque la actual auditoría aprecia una sensible mejora con respecto a la realizada en 2017. Y finalmente, el balizamiento empeora, aunque continúa gozando de buena salud.
