La conducción eficiente consiste en introducir ciertos cambios en nuestra forma de conducir para adaptarla a los motores actuales con el objetivos de reducir el consumo de carburante y la contaminación ambiental y aumentar nuestra seguridad y confort.
El concepto de conducción eficiente lo creó IDAE (Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía) y la DGT y va calando poco a poco en la sociedad. Así, los distintos planes PIVE obligan a los concesionarios a sensibilizar al consumidor mediante la entrega de un folleto explicativo.
Todos los modelos de vehículos tienen un consumo medio de combustible a los 100 kms. Pero esta cifra que a veces se destaca tanto en la publicidad dista mucho de la realidad, ya que cada persona tiene su manera propia de conducir y esto afecta de forma directa al consumo de carburante. Dar frenazos bruscos o acelerones, llevar las ruedas a presión incorrecta, usar unas marchas u otras, los tiempos con el vehículo parado con el motor encendido… Influyen tantos factores que se podría dar una cifra de consumo, no por vehículo, si no por conductor. Por lo visto, los españoles somos los conductores menos eficientes de Europa, con un índice de eficiencia casi tres puntos por debajo de la media comunitaria, por lo que el IDAE (Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía), dependiente del Ministerio de Industria, Energía y Turismo, está poniendo mucho énfasis en que mejoremos nuestra calificación. Y para ello, asociado al Plan PIVE 6, ha diseñado un folleto –10 claves para la conducción eficiente–, que se distribuye entre clientes de concesionarios de automóviles. Bajo el lema “A todos nos gusta que nos digan cómo ahorrar”, esta campaña incluye 10 fáciles pasos para reducir el consumo de hasta un 15% de combustible, garantizando una conducción más placentera y segura para los ocupantes del coche.
¿La conducción eficiente puede averiar el coche?
Lo desveló Autocasion.com en enero de 2013 y la alarma se extendió rápidamente. IDAE se apresuró a desmentirlo hasta que al final reconoció que sí: los consejos para una conducción eficiente son válidos, pero llevados al extremo pueden provocar problemas en el motor del coche. Efectivamente, circular en la marcha más larga posible no significa aplicar la relación más larga en todas las circunstancias. Como todo en la vida, debe primar la coherencia. Para ahorrar, lo primero que hay que tener en cuenta es que el coche debe de estar en perfectas condiciones mecánicas y de mantenimiento, cambiando neumáticos y aceite cuando corresponde, sustituyendo los filtros, revisando el motor, etc. Y además, aplicando unas correctas técnicas de conducción.
Otros consejos para ahorrar combustible
- Arranca sin acelerar o con la aceleración justa y con suavidad.
- Calienta el motor en movimiento, siempre que éste sea lo más uniforme posible.
- Utiliza la relación de marchas más correcta, de acuerdo con la fuerza motriz necesaria y acorde con las revoluciones del motor, potencia, par motor, etc.
- Circula a un régimen de revoluciones adecuado, el más bajo posible en condiciones normales.
- Apaga el motor en paradas largas si no dispones de start-stop.
- Evita los acelerones en vacío o acelerar más de lo necesario.
- Mantén una velocidad constante.
- Anticípate en todas las acciones, principalmente en las previsibles detenciones.
- Utiliza un buen aceite, siempre.
- No sobrecargues el coche. Distribuye adecuadamente la carga, evitando sobre todo levantar la parte delantera del coche.
- Elige el itinerario menos saturado.
- No sobrepases las velocidades establecidas.
- Lleva siempre los neumáticos a la presión adecuada.
- No realices doble embrague ni circules en punto muerto.